lunes, 9 de noviembre de 2009

Sobre las pecas de alguien



Tanto hombres como mujeres desde hace ya un largo del tiempo han buscado liberarse de la cohibición impuesta por varios siglos, incluso milenos en los que el cuerpo era/es mirado y concebido como algo sucio, impropio de los buenos pensamientos, desposeído de emotividad y sensibilidad, incluso de su imagen. El cuerpo fue/es coartado por códigos morales y éticos que niegan su naturaleza. Sin embargo, nuestro lugar ha cambiado, ahora, en nuestros días es mucho más fácil hacer algún tipo de cuestionamiento sobre estos dogmas, en muchos casos religiosos, que condicionan nuestra actitud, nuestro cuerpo ¿por qué no ver el cuerpo como algo hermoso y libre?, ¿Por qué no dibujar constelaciones entre una y otra peca como pretexto para hacer mas cordial la presencia de la imagen de los senos de una mujer o de su vagina o en el caso del hombre, de su pene; de la naturaleza del cuerpo?
Marcela Parra

Sobre el cabello de alguien más





Te muestras de la manera que me siento,
Te mueves, acariciado por el suave viento,
Entre mis dedos, solo tú calmas mi espíritu;
Y aunque por mis ganas de cambiar, te corte de raíz,
Vuelves a mi lado, en custodia del tiempo.
Se que estas presente desde el nacimiento,
Y aun, en una pálida tumba estarás a mi lado.
Por amor, parte de ti se fue con otro.
Y sus manos, solo te convertiste en un recuerdo de amor.
Ahora te he atrapado en el tiempo y sellado en un papel,
De ti en movimiento, tocando el cielo ayudado por el viento.


Luisa fernanda Maecha

Sobre los besos

El a- b- c- d…por cinco (x 5) y El beso: dos insaciables bocas rojas carmesí, absorbidas, afines, avantes, atraídas, atafagadas; bellas, busconas, bulbosas, bullosas, bombásticas; calientes, canónicas, catadas, cargadas, cansadas; deseosas, desgajadas, deshojadas, deshiladas, domesticadas…que se unen por medio del contacto físico a través del cual producen temblor, ansiedad, nervios, sudoración, enrojecimiento de mejillas; piel de gallina, pelos de punta, excitación, exaltación, extrapolación; que sirve para mantener el qué dirán, y el es mejor no darles qué pensar; que gusta, que mantiene y que sostiene a dos a tres o a más individuos que, hacen del beso un bienestar, un explorar, un saborear; que detiene el tiempo y, a veces lo acelera, pero sobre todo, sin importar que el presente el pasado y el futuro se relacionen de tal forma que no existan, sin importar que se camine sin tocar el suelo, sin importar que las bacterias que se transmiten hagan daño pero sobre todo que, sin importar que aunque pasen los años, pretende de lo suyo todo un desagravio.

Daniel Arturo Quitian









Los besos como prácticas rituales enmarcadas en un rito mayor denominado genéricamente “amor” intentan poner de manifiesto por medio de lo físico ideas abstractas que varían de un sujeto a otro, de una época a otra. No es propósito de esta actividad de la experiencia en la que se ha constituido el ejercicio de captar a mis padres dándose un beso teorizar sobre el amor, ya que me parece un exceso y una devoción enfermiza a la racionalidad. Lo que sí puedo decir con toda seguridad, es que ver la forma en que mi papá abraza a mi mamá, quien se ve más pequeña y frágil que de costumbre, es lo suficientemente inspirador para pensar el amor como una fuerza individual mas no uniforme que se vale del cuerpo para ser, para cobrar vida y sentido fuera de la mente de los individuos. La fuerza poética de esta imagen está en el reconocimiento del amor como presencia que existe fuera de mí, pero que no sólo opera en función de mí, sino que ES también apropiable para todos los demás, incluso para mis padres y los suyos, que a lo mejor y para nuestra sorpresa, no han perdido la capacidad de comunicar con su cuerpo.

Alejandra Cano.


"..." me pareció interesante mostrarla desde un beso entre dos hombres. Puesto que creo tienen el mismo derecho a ser participes de tan gustosa actividad, la cual decidí llamar: “muestra de amor”, ya que es eso exactamente lo que se desea dar a conocer: el amor entre dos personas que no por ser Gays dejan de ser individuos con la misma capacidad de amar, de sentir y querer compartir lo mas bonito de si mismo con otro ser humano.
Esta proposición a pesar de ser a cierto punto problemática para los participes y un trabajo polémico, considero es hora de que el mundo empiece a ver la igualdad en el amor, sin esconderse aquellos a los que no les interesa la edad, el estrato, el lugar, el sexo y el momento. Y que tengan libertad de expresión como tanto pregonamos los ciudadanos.


Paola Torres


Agradecimientos


Taller de Historia Crítica del Arte, Marta Combariza, Zoitsa Noriega, Nathali Buenaventura, María Clara Cortés, Luisa Fernanda Ordóñez, María Clara Pardo, Andrea Luchhauu, Simón Yepes, Teresa Gutiérrez, Claudia Acosta, Miguel López, Suely Rolnik, Berta Camarra, Francisco Sierra, Camilo Sánchez, Alexandra McCormick, Carolina Cortés, Luisa Rivera y Pablo.

lunes, 2 de noviembre de 2009

Todas nuestras cosas



Es posible conectar aquello que acontece en nuestra vida cotidiana ante un otro? El modo; ejercicios de conexión: aquello que acontece al rededor nuestro que es develado en una acción inusitada de sentido. Relato y principio del cuerpo y de esas cosas que hacemos de manera inusual, proyectos, recuerdos espirituales y practicas: una sonrisa, un beso de desayuno, mi mascota, nuestro mundo, el sol, la luna ó, porque no?, una constelación en mi antropomorfismo…. Cualquier cosa es posible. ¿Conformidad de lo que se dice con lo que se siente o se piensa? No encontramos preciso decir que nos cuestionamos sobre este hecho. Mas bien, movilizamos el sentido de una práctica tomando como excusa acciones las cuales nos permite develar nuestros asuntos cotidianos compartiendo un escenario de vida común. Nosotros ante otro.

Capturar una imagen en algún momento preciso sobre algo que motive las ganas de expresar un hecho y, de esa manera, experimentar formas nuevas de mirar la realidad: es lo que asevera la apropiación de aquellas entidades que hacen parte de nuestra vida contribuyendo indiscretamente a la formación de ser en él hay. Por lo tanto, recoger diferentes experiencias y trabajarlas con intimidad es un reto a la hora de querer coleccionar vestigios que pueden interpelar la realidad del otro llegando a afectarlo, intersubjetividad. Sentimientos de vida los cuales por la influencia común sufren una metamorfosis para trascender a imágenes globales y sociales, representadas en el objetivo común de esta exposición. Iniciar en la particularidad de cada circunstancia de cada quien y llegar a traducirla en mirada colectiva genera un alto grado de ánimo por el hecho de querer llegar a a la concordancia simbólica que cada uno tiene frente a una tarea propuesta. Se alude a instantes de asimilación que cada uno distingue derivados de la sensibilidad natural de interés propios. Es por ello que se fundan partiendo de algunas tareas que se elaboran gracias a la expresión de Harrell Fletcher y Miranda July en su libro titulado learning to love you more: cada uno de los participantes se apropia de un ejercicio y expresa en vida propia la excusa para indagar en su interior.

Todas Nuestras Cosas es un trabajo orientado a reflexionar sobre aquellos arquetipos simbólicos, icónicos y tangenciales que hacen parte nuestra, puestos ante un otro incitando a un camino de todo aquello invisible dentro del equilibrio ecosistemático. Entra a afectar la forma de palpar la realidad.

John Pérez